viernes, 25 de abril de 2014

SÁNCHEZ CERÉN EN EL VATICANO




En tiempos de la guerra civil salvadoreña (1980-1992) nadie hubiera considerado posible que un comandante guerrillero, entonces catalogados por las leyes, por el Estado salvadoreño y por el Ejército, como "terroristas", pudiera ir de visita a saludar al jefe del Vaticano. Sin embargo, en estos días el "comandante" está de visita en Roma para saludar al Papa.


¿Qué es lo que ha sucedido? ¿Qué es lo que está posibilitando esto?

En primer lugar, lo posibilita la llegada de un Papa más abierto a escuchar el clamor de los pobres. Es el primero que ha criticado en su médula divinizadora del mercado al capitalismo imperante.

En segundo lugar, lo permite la incapacidad del partido ARENA de auto-criticarse, el recurrir siempre a ese comportamiento malsano de culpar a otros de la propia crisis.

Si las circunstancias históricas y la coyuntura político-religiosa se mantiene como va, ARENA podría encontrarse con la beatificación de Arnulfo Romero, lo cual llevaría, por enésima vez preguntarse por el asesino del arzobispo. Bien haría el partido tricolor en preparar su justificación, defensa o como se le quiera llamar, habida cuenta que su imagen como partido estaría en entredicho.

Se le ha adelantado de nuevo el FMLN al mandar a su presidente electo a saludar al nuevo pontífice, que a todas luces es de la corriente progresista de la Iglesia Católica, en la línea de Juan XXIII y Pablo VI, ambos acusados, en su momento, de "marxistas" y "comunistas" por los editorialistas del Diario de Hoy. ¿Qué hará ARENA de inteligente? ¿Pedirle a la "pirómana" Evangelina del Pilar de Sol que acuse al Papa Francisco de "comunista"? ¿Seguir preguntándose "qué será de nuestro Señor Jesucristo si gana el FMLN"? Pues, como ven "nuestro Señor Jesucristo", si no se habían fijado, ya no está bajo la tutela ideológica de la derecha salvadoreña ni vaticana.

El otro dato que refuerza la tesis de que la derecha pierde fuerza es que, el proceso de "negociación", "diálogo", "tregua" o como se llame, entre pandilleros, ya no la maneja Mons. Colindres y Cia., evidentes personajes conservadores, sino el sector progresista del cristianismo salvadoreño. 

El FMLN tiene suficientes condiciones para demostrar si efectivamente quiere sacar al país del estado en que se encuentra. Como sucede en estos casos, sólo la evidencia de las obras realizadas dará razón de su gestión.
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Un canto a la vida.

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