viernes, 17 de diciembre de 2010

DE LA RECIENTE PUBLICACIÓN DEL CÍRCULO LITERARIO VICENTINO

TH
Los miembros del Círculo Literario Vicentino se constituyen en aquello mismo que el texto bíblico dice de Juan, el Bautista: voz de uno que grita en el desierto, porque yermo es la condición que mejor describe hoy el escenario de la literatura vicentina. Lo que un tiempo fue jardín perfumado de pensamiento, con celadores del talante de Sarbelio Navarrete, hoy es un predio baldío, como los que desencantan actualmente la ciudad de San Vicente.
El esfuerzo de los que escriben en Horizontes de Luz II expresa el anhelo de retorno a ese espacio vital y mágico que procura la metáfora, la plasmación de personas y situaciones en la constelación del verso y la palabra.
Seguramente un mayor empeño en la labor tipográfica y ortográfica haría más placentera esta lectura.
Los mejores éxitos a los que en esta edición escriben.
El valle de Jiboa es un Edén,
que DIOS ha dibujado con amor,
los cerros y las lomas en vaivén,
soldados que nos cuidan con valor.
(Blanca Lilian Rodríguez, Mi recordada torre vicentina)
AL FINAL
Manantiales de gloria se ven muy lejanos,
sensaciones voraces invaden las ganas,
matices de colores, imitando el arcoíris,
ilusiones del mañana son palabras vanas.
Sensaciones febriles turban la existencia,
escalofriante y funesto parece el vivir.
El llorar es consecuencia de ilusiones truncadas,
y al final, solo queda morir.
(Marta Julia Flores)
Es del color eterno del amplio azul del cielo,
es gota congelada, de cristal de rocío,
policromo paisaje pintado en el vacío;
nos regala esperanzas, nos brinda fiel consuelo.
(Adolfo González Hernández, El color del alma)

EL CÍRCULO LITERARIO VICENTINO

En la foto algunos miembros del Círculo Literario Vicentino. Ellos se plantean entre sus objetivos:
  1. Fomentar el interés por la cultura;
  2. Inculcar en centros escolares el interés por escribir composiciones literarias;
  3. La incorporación de más personas al cultivo de la literatura;
  4. Presentar recitales poéticos y realizar caravanas literarias;
  5. Intercambiar experiencias con otros literatos.
Es de alabar el esfuerzo de estas personas y animarles a seguir tejiendo con paciencia la cultura como remedio saludable ante el ímpetu de la violencia.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

LOS DESMANES DEL NÓBEL


Por: Guillermo Rodríguez Rivera.





Los tiempos cambian y a veces no es para progresar.




Hay quien dice que Suecia, la única socialdemocracia que lo era de veras, -cuando todas las demás que usaban el nombre se escoraban a la derecha- es ya un encubierto miembro de la OTAN.


Han pasado los tiempos en que el partido de Olof Palme gobernaba conjuntamente con los comunistas y en el que Suecia era el único gobierno del occidente europeo que se permitía acoger a los jóvenes norteamericanos que quemaban su tarjeta de reclutamiento para no ser enviados a matar (o a morir) en las selvas de Vietnam, en la primera guerra que perdieron los Estados Unidos, porque nunca tuvieron ni siquiera una consigna con la que justificarla ante su pueblo.


Las cosas se han puesto peor desde que desapareció la Unión Soviética, ciertamente más hija de su padrastro Stalin que de su padre Lenin, pero que era una izquierda beligerante que permitía la existencia de otras, porque había izquierdas. Los Estados Unidos ahora muestran abiertamente que se sienten capaces de hacer lo que quieran, sin que nada ni nadie interfiera.


En Europa se está acabando todo: la izquierda ya no tiene casi partidarios (ni partidos) y como desapareció esa amenaza a la vieja burguesía y el fantasma de recorrido se ha mudado a otros sitios, va desapareciendo también la “sociedad de bienestar”, que era la vitrina para evitar que los desvariantes cayeran en manos de algún hijo de Marx.


Los nuevos paquetes que la UE acuerda con los administradores yanquis del FMI se aplican a los más pobres dentro de los privilegiados países de Europa: a griegos e irlandeses, al menos por ahora. Pero aunque sea por partes, el paquetazo neoliberal se va extendiendo: empiezan a retrasar la edad de la jubilación, a bajar las cuantías de las pensiones, a liquidar la seguridad social, a aumentar el desempleo.


Porque eso que empieza a perderse, aunque los europeos no lo sepan, era también una consecuencia de la existencia del comunismo que ellos se permitían el lujo de mirar de arriba abajo, sin sospechar el bien que les hacía.


Ahora Suecia le da asilo a los disidentes cubanos y su fiscalía acuerda con la Interpol la persecución, con alerta roja –como si fuera Martin Bormann o Jack The Ripper– del australiano Julian Assange, por formicar con dos suecas amigas, dicen ellas que sin condón. Ahora no hay reclutamiento obligatorio y “patriótico” en las fuerzas armadas estadounidenses. Los hijos de los millonarios ya no tienen que ir –o hacer como que van– a cumplir ese deber. Algunos cumplían y otros no: John F. Kennedy fue un valiente teniente en la Segunda Guerra Mundial; George W. Bush se pasó la de Vietnam entre los soldados de su padre en el estado de Texas, bebiendo whisky y dejando correr los años de peligro para luego encaramarse en la silla presidencial y mandar a los jóvenes a la guerra, cuando el supo esconderse muy bien de la suya. Ahora los soldados son los pobres, que arriesgan la posibilidad de morir no por patriotismo, sino por el salario que les pagan.


Acabo de leer –lo tengo ante mí– el discurso con el que Mario Vargas Llosa aceptó el Nóbel de literatura que le fuera conferido por la obra de toda su vida.


Quisiera empezar diciendo que soy un declarado admirador del escritor Mario Vargas Llosa: lo sigo desde su temprana La ciudad y los perros y de aquella excelente noveleta titulada Los cachorros, que Casa de las Américas editó en los años sesenta. He accedido, como he podido, a sus novelas a pesar de que en Cuba no se editan.


Soy un decidido opositor de la idea de que los escritores que se han convertido en enemigos de la Revolución Cubana, no deben ser editados en nuestro país. Algunas personas entienden que esa exclusión es un castigo a nuestros enemigos ideológicos. Yo no lo veo así: creo que se castiga a los lectores cubanos cuando dejan de leer páginas excelentes: la medida, para nada afectará al escritor en cuestión. Tampoco sé si Vargas Llosa, como han hecho García Márquez o Julio Cortázar, amigos de la Revolución Cubana, cedería los derechos de sus novelas para ser editadas en Cuba, pero creo que el gran público lector que tenemos disfrutaría obras como La fiesta del chivo, apasionante crónica de la conspiración que puso fin a la vida del tirano dominicano Rafael Leónidas Trujillo.


Leer el discurso de aceptación del novelista lo obliga a uno, forzosamente, a tener que contrastarlo, compararlo con su obra, y nos da idea de la distancia que media entre el brillante narrador -capaz de hacernos ver el sentido y las trágicas, dramáticas o cómicas dimensiones de la realidad latinoamericana- y el acomodado pequeño burgués de Arequipa (elevado a burgués por su talento, su vanidad y sus temores) que abjuró no ya de la Revolución Cubana, sino de cualquier modalidad de marxismo o socialismo, para ser el escritor “admitido” al que celebra el mundo burgués de este tiempo, porque esa propia abjuración es el gran requisito para su admisión, mucho más que la excelencia de su prosa.


El marxista que fuera en su juventud nunca pretendió buscar otra lectura de Marx que se apartara del verticalismo soviético asumido por la Revolución Cubana: su desencanto lo llevó directamente a engrosar la momificada colección de demócratas liberales que han sido y que han sumido a la América Latina en esa subordinación a los intereses norteamericanos que pobló nuestros países de las dictaduras que el novelista dice despreciar, pero que eran la salida a la que los buenos demócratas liberales y sus jefes norteamericanos echaban mano cuando los pueblos se les ponían indóciles. Don Mario dice repudiar esas tiranías –gestada la de Pinochet por el demócrata liberal Kissinger– aunque reverencia a sus propulsores.


Don Mario, en fin, no fue el revisionista que busca otra verdad en la revolución, sino el arrepentido que abandonó la plaza de la tía Julia para irse al salón de la prima Patricia; el claudicante que, aunque persistan la explotación y las injusticias sociales que vio en su juventud, regresa al conformista redil de los demócratas liberales: no hay nada que hacer sino mantener la alternancia de gobiernos que protegen los privilegios de los de arriba, que son el verdadero poder.


De dientes para afuera se indigna porque América Latina ha incumplido con la emancipación de sus indígenas pero, como una Malinche andina, considera una “seudodemocracia payasa” el gobierno de Evo Morales en Bolivia, uno de los pocos regímenes democráticos del país donde mayor número de golpes militares han ocurrido en el mundo, en el que existe una feroz oligarquía que no ha podido socavar el abierto apoyo popular a Evo. Que yo sepa, el presidente boliviano nunca se ha propuesto escribir una novela como La casa verde. Acaso intentar ese propósito que no conseguiría, sería una bufonada del dirigente sindical cocalero, pero esa bufonada es hipotética. La payasada de Mario Vargas Llosa sí tuvo lugar, cuando aspiró a la presidencia de Perú y fue vapuleado nada menos que por Alberto Fujimori. Acaso de esa desastrosa aventura presidencial provenga la herida no cicatrizada del novelista, y también la envidia que el político Evo Morales le provoca.


Don Mario irá a codearse en la historia política peruana –no rebasa ese localismo– con Prado Ugarteche, Belaúnde Terry, Alejandro Toledo y el diz que aprista Alan García. En su discurso sueco, menciona al nunca desmentido marxista que fue César Vallejo, quien seguramente se revolvería en su tumba de Montparnasse si lo escuchara. Sólo le faltaría invocar a José Carlos Mariátegui para que la comedia fuera perfecta.


Haydee Santamaría lo liberó de la farsa de mencionar al Che, y el ego de Don Mario nunca pudo perdonárselo. Ahí está el verdadero punto de quiebre del hispanoperuano: hasta ahí llegaron sus ínfulas de revolucionario. A ver quién logra liberarlo de citar al autor de España, aparta de mí este cáliz.Recordaremos siempre al excelente narrador que es Mario Vargas Llosa. Se nos irá al basurero el adocenado político que se ha empeñado en ser. Quizás ahí le hubiera sido útil el consejo de su prima-esposa, que él mismo entiende como el mayor elogio que ha recibido: “Mario, para lo único, para lo que tú sirves es para escribir”.

lunes, 13 de diciembre de 2010

POLIS, ETHOS CULTURAL Y RELIGACIÓN











TH

Muy pocos fenómenos de la existencia logran hacer confluir las categorías de religión, política y cultura. Uno de ellos es la aparición de la Virgen María en la expresión guadalupana. Un evento que satisface la concepción cultural, la concepción política y la concepción religiosa.

Se suele ironizar diciendo que los laicos-ateos mexicanos suelen afirmar: "Dios no existe, pero ciertamente, la Virgen de Guadalupe es su mamá". Para decir que uno se puede permitir dudar de la categoría religiosa, pero no logra negar la fuerza cultural que ella tiene.

Evidentemente, para alguien que profese la fe cristiana, pesa más el otro elemento, la firmación de la exitencia de Dios a partir de la teofanía presente en el fenómeno religioso de la aparición mariana.

I. Hablemos primero del espacio político. Evítese de inmediato vincular en este post la política a los partidos políticos, aunque estos últimos tengan algo que ver con ella.

La primera constatación para una persona que participa como expectador en una celebración guadalupana es que se trata de un fenómeno eminentemente popular. Es decir, aunque en los orígenes del acontecimiento esté la teología cristiana como elemento complejo, lejano de los naturales procesos populares y culturales, en el devenir histórico el pueblo se apropia del fenómeno por motivos que sólo la relación entre lo cultural, lo religioso y político pueden explicar.

Que la Virgen se le aparezca a un indio, y que el rostro de ella sea moreno determina nuestro argumento. De momento significa que toda expresión de la revelación divina pasa necesariamente por una cultura, por un contexto político, y por los problemas sociales que afrontan las poblaciones de frente al domino colonizador. En este punto carece de sentido discutir si la existencia de Juan Diego es fruto de un relato mitológico o si es un dato histórico. Por más maniobras que hagan los sutiles intelectuales, cuando la tradición entra en el pueblo, su fuerza es inapelable.

La concepción de la polis, de la civitas y de la urbe han sido impuestas a los indígenas americanos. Por tanto, que la Virgen quiera aparecerse a Juan Diego significa afirmar la cultura de los destinatarios de la aparición. Nuestro argumento no llega hasta el punto de afirmar también la bondad moral del que recibe el mensaje mariano, eso es materia para predicadores.

Los argumentos de Bartolomé de las Casas en sus crónicas del descubrimiento se detienen en los puntos siguientes: a) Los indígenas no usan vestidos sobre sus cuerpos, viven en un estado natural; b) son mansos y no dados a la violencia -exceptuando algunos casos particulares-; c) que es voluntad de Dios el que se descubrieran las tierras americanas; d) que la mansedumbre de estas gentes es terreno fertil para convertirlas a la fe cristiana; e) que el método a utilizar para evangelizarlos debe ser pacífico y apegado al derecho natural, divino y de las gentes; f) que los indígenas creían que los españoles procedían del cielo; g) que los colonizadores destruyeron las Indias o tierras americanas con el afán de recolectar la mayor cantidad de oro posible.

Según Las Casas, la posibilidad de "civilizar" a los indígenas pasa necesariamente por el proceso de evangelización. Tal proceso supone la sujeción de la cultura y forma de organización de los indígenas a la visión cristiana que de esas categorías tiene el colonizador. Por tanto, lo primero que surge no es la organización política, sino las formas de organización urbana en el modo que las entienden los colonizadores del siglo XVI. La adiministración de la res publica, como posibilitación de las formas complejas de organización es un fenómeno tardío, que surge en el contexto de la crisis provocada por la destrucción de las culturas originarias, la conservación de aquello que se pueda conservar de ellas y las nuevas formas de organización política surgidas a partir de la independencia.

Cuando llega la independencia, los factores religión-política-cultura han caído en un sincretismo tal, del que dificilmente se podrá escapar en los siglos sucesivos. Hasta la actualidad se puede constatar religiones que piden favores al sistema político, políticos que necesitan el favor de las religiones para vencer elecciones. Además, se da un distanciamiento y una confusión respecto de los valores culturales originarios. Se necesita un esfuerzo redoblado para ser fieles a la propia cultura.

En ese sentido, lo político se constituye en el ámbito en que se da la expresión religiosa y cultural. Entre la cultura originaria y las formas culturales actuales median muchos siglos de transformaciones históricas, muchas formas de falseamiento de los valores colturales y todo vehiculado por las tradiciones religiosas, que siempre -exceptuando las supuestas culturas laicas- han pretendedido tener la última palabra en este debate.


II. En cambio el ethos cultural es más complicado. En este caso de la aparición de la Virgen puede significar: primero, y en sentido negativo, una forma más de dominación religiosa sobre el pueblo. Segundo, y en sentido positivo, una forma de acercamiento cultural de la revelación cristiana a la cultura objeto de dominación. En el primer caso los agentes más interesados son las élites religiosas, políticas y económicas, ocupadas en el aumento del dominio ejercido sobre el pueblo. En el segundo caso, el principal interesado es el pueblo, que percibe una evidente cercanía de Dios a su cultura.
En el caso más grave, y dada la esencialidad de la cultura para posibilitar el proceso evangelizador, cuando se daña la cultura -como de hecho sucedió en los pueblos americanos- se daña gravemente el mismo proceso evangelizador. Entonces, toda posibilidad de éxito en los procesos contemporáneos de evangelización pasa necesariamente por el respeto de las culturas originarias y por el respeto de las expresiones culturales actuales.
La mutua implicación entre cultura y religión es puesta en peligro por los fenómenos migratorios y de urbanización, en donde las identidades culturales son debilitadas o destruidas. En esa línea, la preservación de las tradiciones del tipo de la aparición de la guadalupana, puede bien ayudar a mantener los principios orginarios de la cultura y de la religión, siempre y cuando se mantenga el equilibrio entre la expresión popular del fenómeno y el análisis crítico del mismo.
III. En fin, el factor religioso. Si la colonización es vista dentro de los designios salvíficos de Dios, entonces eso obliga a pasar de la negación de la capacidad de los indígenas para adorar a Dios, apelando a su estado salvaje, a la capacidad que ellos puedan tener de recibir desde su libertad el don de la gracia divina. Como dirían los medievales ¿tienen los indígenas una potentia oboedientialis? La cuestión interesa en modo consciente al colonizador, de donde parte el afán evangelizador. Al indígena no podía interesarle, pues desconocía los presupuesto doctrinales de la cuestión. Por tanto, era necesario pasar a un proceso forzado de catequesis para suscitar en ellos el interés por la fe cristiana. En ese proceso catequético se jugó la potencia colonizadora la gloria y la miseria de la evangelización en tierras americanas. La indagación en esas fuentes metodológicas tiene la clave para entender mejor la fenomenología religiosa-cristiana del presente momento histórico.
Si los medios de evangelización estaban en manos de los religiosos y clérigos que acompañan el proceso colonizador, entonces, para poder tener algún grado de incidencia en la cuestión religiosa había que formar parte de la jerarquía, y así se plantea la pregunta: ¿a partir de qué siglo los indígenas comenzaron a ser ordenados sacerdotes e inician a formar parte de la jerarquía de la Iglesia? Es pertinente también la otra cuestión: ¿en qué momento los fieles laicos -indígenas- inician a tener protagonismo en la acción evangelizadora de la Iglesia?
La correlación entre política, religión y cultura son indispensables para situar la propia existencia, individual y colectiva.
En la ciudad desde la que se escriben estas letras (San Vicente, El Salvador) se celebra actualmente el 375 aniversario de la llegada de los españoles al actual asentamiento urbano y la respectiva fundación de la ciudad. El acto lo realizan autoridades políticas y edilicias en una eclatante confusión de fechas y lugares, bajo un árbol de tempisque, donde se supone acamparon la primeras familias que fundaron la ciudad. Con ello se pasa totalmente por alto, los asentamientos indígenas que dieron origen a tal ciudad, que sin duda era la plaza de comercio impuesta por el colonizador, ubicada exactamente en un punto equidistante entre los tres asentamientos indígenas de los que se tiene prueba histórica: tecoluca-tehuacán, apastepeque e ixtepeque-tepetitán.




viernes, 10 de diciembre de 2010

DE CÓMO EL CONQUISTADOR INICIA SUS VICIOS Y DE CÓMO LOS PROYECTA EN LAS TRADICIONES CEREMONIALES DE LOS CONQUISTADOS


Hallaron estos dos cristianos por el camino muncha [sic] gente que atravesaban a sus pueblos, mujeres y hombres, siempre los hombres con un tizón en las manos y ciertas hierbas para tomar sus sahumerios, que son unas hierbas secas metidas en una cierta hoja, seca también, a manera de mosquete hecho de papel de los que hacen los muchachos la Pascua del Espíritu Sancto [sic]; y, encendido por la una parte dél, por la otra chupan o sorben o reciben con el resuello para adentro aquel humo, con el cual se adormecen las carnes y cuasi emborracha. Y así diz que no sienten el cansancio. Estos mosquestes o como les nombráremos, llaman ellos tabacos. Españoles cognocí [sic] yo en esta isla Española que los acostumbraron a tomar que, siendo reprendidos por ello diciéndoseles que aquello era vicio, respondían que no era en su mano dejallos de tomar. No sé qué sabor o provecho hallaban en ellos.


DE LAS CASAS Bartolomé, Historia de las Indias, vol. I, Alianza Editorial, Madrid p. 586.


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Tabaco, entonces, era llamado originalmente el instrumento para fumar las hierbas susodichas y no la hierba misma.

DE LA IGNORANCIA DE LOS DESCUBRIDORES Y DE LA GENTE CÁNDIDA QUE CELEBRA SUS GLORIAS


TH

De cómo los descubridores -de su propia ignorancia- daban razón de ella.




Andando en cerco de una de las lagunas vido el Almirante una sierpe de siete palmos en largo, la cual, como vido la gente, huyó al agua; y, porque no era honda, con las lanzas la mataron. Hizo salar el cuerpo para traello a los Reyes.


Esta sierpe, verdaderamente es sierpe y cosa espantosa; cuasi de manera de cocodrilo o como un lagarto, salvo que tiene hacia la boca y narices más ahusada que lagarto. Tiene un cerco, desde las marices hasta lo último de la cola, de espinas grandes, que la hace más terrible; es toda pintada como lagarto, auqnue más verdes escuras las pinturas. No hace mal a nadie y es muy tímida y cobarde. Es tan excelente cosa de comer, según todos los españoles dicen, y tan estimada -mayormente toda la cola, que es muy blanca cuando está desollada- que la tienen por más preciosa que pechugas de gallina ni otro manjar alguno. De los indios no hay duda sino que la estiman sobre todos los manjares. Con todas sus bondades, aunque soy de los más viejos destas tierras y en los tiempos pasados me vi con otros en grandes necesidades de hambre, peno nunca jamás pudieron conmigo para que della gustase. Llámanla los indios de esta isla Española iguana.


DE LAS CASAS Bartolomé, Historia de las Indias, vol I, Alianza Editorial, Madrid 1994, p. 570; también en: COLÓN Hernando, Historia del Almirante, cap. XXVI.

lunes, 29 de noviembre de 2010

sábado, 27 de noviembre de 2010

LA CIUDAD DE SAN VICENTE SIN AGUA POTABLE POR TERCER DÍA CONSECUTIVO



Una buena parte de la ciudad de San Vicente se ha quedado sin el servicio de agua potable. El líquido vital es indispensable en las casas de los vicentinos.
Se preguntó a los trabajadores que están haciendo las perforaciones en las calles de San Vicente y ellos han confirmado que es ADIMASA la que está dirigiendo los trabajos de cambios de tuberías. Sin duda es importante que las cañerías estén en buen estado. Sin embargo, por tres días los habitantes de diversas colonias no han tenido servicio de agua y ADIMASA no ha previsto la distribución de agua para los habitantes. Lo que sí es cierto es que el servicio de agua en amplios sectores de San Vicente, por no decir en toda la ciudad, es deficiente. Prácticamente los vicentinos cuentan con servicio de agua potable sólo por las noches.
Los señores de ADIMASA son puntuales en cobrar los recibos de pago, pero son deficientes en asistir a la población cuando esta necesita el servicio del líquido vital.
Por el alcalde ni se pregunte, porque ese sujeto se desentiende por completo de los problemas del pueblo.
Los habitantes de las distintas colonias y barrios demandan el pronto restablecimiento del servicio de agua potable o la distribución de agua con pipas en los sectores afectados.

martes, 23 de noviembre de 2010

AMOAR INVITA A MISA EN MEMORIA DE ARZOBISPO ARTURO RIVERA DAMAS


La Asociación Monseñor Oscar Arnulfo Romero
invita a la misa en memoria de Monseñor Arturo Rivera Damas,
quinto arzobispo de San Salvador,
con ocasión de su pascua de resurrección
y en el marco de su aniversario de oro de consagración episcopal.


Hora: 10:00 am.

Día: Viernes, 16 de noviembre de 2010.

Lugar: Cripta de Catedral Metropolitana de San Salvador.


La gestión de Rivera Damas como arzobispo de San Salvador se caracterizó por su fuerte sentido eclesial y por su incansable lucha por favorecer la negociación para una solución pacífica al conflicto armado (1980-1992), por tal motivo puede justamente ser llamado:
ARTESANO DE LA PAZ

jueves, 11 de noviembre de 2010

jueves, 4 de noviembre de 2010

MUERTOS QUE CAMINAN























MEDARDO LARA, el alcalde de San Vicente, de gustos exóticos, como el de profanar tumbas, ni construyó el muro del cementerio, ni limpió la basura acumulada en las tumbas ubicadas en esa fatídica esquina del cementerio. Las fotos fueron tomadas el dos de noviembre. Pero el alcalde Medardo es blindado, no le interesa saber nada de los reclamos del pueblo, o a lo mejor es simplemente un zombi, uno que parece estar vivo, pero tiene el cerebro muerto. Y que los familiares fueron a enflorar a sus muertos lo prueba las humildes flores que han sido depositadas en las tumbas. Con alcaldes como Medardo San Vicente no saldrá de la miseria.





sábado, 30 de octubre de 2010

Sobre la naturaleza misionera de la Iglesia

Fuente: Blog Parroquia El Calvario, San Vicente.

Directamente implicados en el proceso de predicación evangélica, así se ven los miembros de la parroquia El Calvario, de San Vicente. Y lo dejan ver bien claro en sus editoriales, programa de radio Iglesia Viva (Jueves, de 7:00 a 8:00 pm.) y en su blog. Es meritorio que esa comunidad cristiana utilice los medios de comunicación.
A continuación el texto del editorial:


POR UNA PARROQUIA EVANGELIZADA Y EVANGELIZADORA

"La Iglesia es por su propia naturaleza misionera". Así lo afirma el N° 2 del Documento Ad Gentes del Concilio Vaticano II. Esto quiere decir que la Iglesia no sólo tiene una misión, sino que ella ES MISIÓN. O sea que la Iglesia se entiende a partir de la Misión.
La naturaleza misionera de la Iglesia tiene un fuerte fundamento bíblico.En el capítulo 28, versículos del 18 al 20 del Evangelio de San Mateo, se lee: Me ha sida dada toda autoridad en el cielo y en la tierra. Vayan, pues, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos. Bautícenlos en el nombre del Padre y del Hijo y el Espíritu Santo, y enséñenles a cumplir todo lo que yo les he encomendado a ustedes.
Los discípulos de Jesús, en los inicios de la predicación evangélica, eran enviados desde su casa hasta los extremos confines de la tierra. Así lo dice el Libro de los Hechos de los Apóstoles 1,8
A tal punto que Pablo llega a decir: Ay de mí si no evangelizo (1 Co 9,16).
Lo más natural, entonces, es que nuestras parroquias, en cuanto parte de la Iglesia Universal, sean verdaderas comunidades misioneras. Pero, ¿es así en la realidad? Es decir, ¿todas las parroquias de nuestra ciudad son misioneras?
Y que tengamos que construir comunidades cristianas misioneras se constituye hoy en una imperiosa necesidad.
Muchos predicadores -tanto laicos como sacerdotes- se lamentan de la proliferación de las sectas protestantes, de la situación de violencia en que vive el país, de la precariedad económica en que vivimos, de las maras,... etc. pero muy pocos se organizan efectivamente para combatir todos esos problemas.
Una parroquia misionera, no sólo se queda en un discurso moralizante, de condena apocalíptica y de difusión del miedo, sino que, sobre todo, tiene programas de evangelización bien montados y estructurados.
De ahí la gran pregunta: ¿qué tan preparados estamos para afrontar los desafíos que se le presentan a la Iglesia hoy? ¿Podemos seguir con una actitud pasiva ante los problemas de la sociedad?
El documento de APARECIDA nos habla de una CONVERSIÓN PASTORAL, necesaria en todos los niveles de la Iglesia. En el N° 366 dice: Obispos, presbíteros, diáconos permanentes, consagrados y consagradas, laicos y laicas, estamos llamados a asumir una actitud de permanente conversión pastoral, que implica escuchar con atención y discernir "lo que el Espíritu está diciendo a las Iglesias" (Ap. 2,29) a través de los signos de los tiempos en los que Dios se manifiesta.
El dato estadístico dice que de cada seis personas que habitan la tierra, sólo dos son cristianos. Es decir, que de esos dos cristianos, uno es católico, el otro protestante. Ello implica que la tarea de predicar el Evangelio es apremiante y está apenas en sus inicios.
Hermano y hermana que te declaras cristiano, ¿estás dispuesto a asumir esta responsabilidad? ¿O prefieres seguir por las sendas del desaliento y la mediocridad?
Hoy es el momento de participar.

Dr. Jorge Lemus, Premio Nacional de Cultura (El Salvador, 2010)


"Espero que este premio despierte el interés en otras personas por el rescate y la revalorización de los indígenas en El Salvador", así se expresó Jorge Lemus, ganador del Premio Nacional de Cultura 2010, que entrega anualmente la Secretaría de Cultura.
El galardón le fue concedido por su "preocupación y dedicación por crear condiciones para garantizar un cambio generacional de náhuat-hablantes", según el acta del fallo del jurado calificador.
Lemus trabaja en la revitalización de la lengua náhuat y la visualización del problema de los indígenas salvadoreños desde hace 25 [años], sus investigaciones han sido elaboradas especialmente con la cultura pipil.
Según explicó el lingüista, el proyecto que ha desarrollado se llama "Revitalización de la lengua náhuat", el cual tiene varios componentes como libros de texto, capacitación de los maestros, la enseñanza del idioma en los centros escolares, entre otros.
"El proyecto de este año es la Cuna Náhuat, que está dirigido a niños de 3 a 5 años, siempre en Santo Domingo de Guzmán, Sonsonate, donde tenemos a 15 niños y 4 señoras de esas comunidades a quienes hemos capacitado a pesar de su no escolaridad; hemos convertido a estas señoras en profesoras", explicó Lemus.
El secretario de cultura de la presidencia, Héctor Samour, detalló que el Premio Nacional de Cultura "es el más importante reconocimiento que desde el Gobierno de la República se hace a un artista o a una entidad artística cultural".
"Me siento muy feliz, pienso que es un reconocimiento no solo a mi trabajo como investigador, sino también para todos los que han colaborado en este proyecto", mencionó el Lemus.
Antes de que se desarrollara "Revitalización de la lengua náhuat", quedaban unos 200 náhuat hablantes en todo el país. Ahora la cifra se ha multiplicado ya que actualmente hay alrededor de 3 mil personas aprendiendo esta lengua.
El acto oficial de la entrega del premio será el próximo 5 de noviembre en Casa Presidencial, con el presidente de la República, Mauricio Funes.
LOS PREMIOS NACIONAL DE CULTURA
Fuente: CONTRAPUNTO.
César Sermeño (1994)
Ceramista

Francisco Andrés Escobar (1995)
Literatura

Camilo Minero (1996)
Pintor

Alejandro Cotto (1997)
Promoción Cultural

Esteban Servellón (1998)
Músico

Dorita de Ayala (1999)
Teatro

Don Ángel Mendoza Alvarado (2000)
(San Pedro Masahuat, Departamento de La Paz)
Arte popular

APACULSA (2001)
Patrimonio Arquitectónico Construido

José Raúl Flores Zelayandía (2002)
Danza Popular

María Marta de Regalado (2003)
Gestión Cultura

Pedro Escalante Arce (2004)
Investigación Científica Cultural

Matilde Elena López (2005)
Literatura

Cofradía de Santo Domingo de Guzmán (2006)
Religiosidad y cultura popular

Enrique Salaverría (2007)
Escultura

Isabel Dada (2008)
Teatro

Alfonso Kijadurías (2009)
Poesía

miércoles, 20 de octubre de 2010

miércoles, 13 de octubre de 2010

Jorge Galán presenta su obra LOS OTROS MUNDOS


Este miércoles, 13 de octubre, presentó su obra Los otros mundos el escritor salvadoreño Jorge Galán.
Nació en San Salvador, El Salvador, en 1973.
Fuente: Omni-Bus.
Estudió Letras en la Universidad Centroamericana "José Simeón Cañas" (UCA). Gana su primer premio en 1996, con los Juegos Florales, organizados por el entonces Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONCULTURA), la instancia rectora de las políticas culturales en El Salvador (ahora, la Secretaría de la Cultura). Premio Nacional de Poesía en los años 1996, 1998 y 1999. En el 2000 se le concede el Gran Maestre de Poesía Nacional y, en el 2004, con Tarde de martes, gana el premio Hispanoamericano de Poesía de Quetzaltenango, Guatemala. Ese mismo año obtiene el Premio Nacional de Novela con Unos ojos sombríos. Dos años después, en el 2006, su poemario, Breve historia del Alba, recibe el Premio Adonais y, con su novela El sueño de Mariana, gana nuevamente el Premio Nacional; esta última fue publicada en el 2009 por la editorial guatemalteca F&G Editores. También ha publicado literatura infantil: El premio inesperado (con el sello Alfaguara) y Una primavera muy larga, premio Charles Perrault (2005), organizado por la Alianza Francesa en El Salvador. La habitación (2007) y El día interminable (2004) son otros de sus libros, este último incluido en la Colección Nueva Palabra de la editorial estatal. Entre sus más recientes logros se encuentra el largo poema Los trenes en la niebla, el cual recibió el Premio del Tren Antonio Machado (2010) de Madrid y su libro de poesía infantil Los otros mundos que ha sido publicado por Alfaguara este año. La edición de enero-febrero 2010 de la revista World Literature Today, de la Universidad de Oklahoma, dedica su portada a Jorge Galán, acompañada de una nota introductoria a cargo de la escritora salvadoreña Claribel Alegría.

AGENDA CULTURAL PALACIO TECLEÑO


SACERDOTIUM NON EST OTIUM







jueves, 7 de octubre de 2010

Mario Vargas Llosa PREMIO NOBEL DE LITERATURA



El escritor Mario Vargas Llosa, uno de los máximos representantes de la literatura latinoamericana, ha sido distinguido con el Premio Nobel de Literatura por su cartografía de las estructuras del poder y sus mordaces imágenes sobre la resistencia, la revuelta y la derrota individual". El autor de obras como La ciudad y los perros, Conversación en La Catedral o La fiesta del Chivo ha declarado que se siente "muy conmovido y emocionado" por el galardón. El próximo 3 de noviembre la editorial Alfaguara publicará su próxima novela, El sueño del celta, con una tirada inicial para todo el ámbito del español de 500.000 ejemplares. Sus editores conocieron la noticia en la Feria del Libro de Frankfurt en medio del entusiasmo generalizado. La directora de Alfaguara, Pilar Reyes, ha declarado que “hoy el idioma español está de fiesta”.

Mario Vargas Llosa nació en Arequipa, Perú, en 1936. Aunque había estrenado un drama en Piura y publicado un libro de relatos, Los jefes, que obtuvo el Premio Leopoldo Alas, su carrera literaria cobró notoriedad con la publicación de La ciudad y los perros, Premio Biblioteca Breve de 1962 y Premio de la Crítica en 1963. En 1965 apareció su segunda novela, La casa verde, que obtuvo el Premio de la Crítica y el Premio Internacional Rómulo Gallegos. Posteriormente ha publicado piezas teatrales (La señorita de Tacna, Kathie y el hipopótamo, La Chunga, El loco de los balcones y Ojos bonitos, cuadros feos), estudios y ensayos (como La orgía perpetua, La verdad de las mentiras y La tentación de lo imposible), memorias (El pez en el agua), relatos (Los cachorros) y, sobre todo, novelas: Conversación en La Catedral, Pantaleón y las visitadoras, La tía Julia y el escribidor, La guerra del fin del mundo, Historia de Mayta, ¿Quién mató a Palomino Molero?, El hablador, Elogio de la madrastra, Lituma en los Andes, Los cuadernos de don Rigoberto, La Fiesta del Chivo, El Paraíso en la otra esquina y Travesuras de la niña mala. Ha obtenido los más importantes galardones literarios, desde los ya mencionados hasta el Premio Cervantes, el Príncipe de Asturias, el PEN/Nabokov y el Grinzane Cavour.

El sueño del celta narra una aventura que empieza en el Congo en 1903 y termina en una cárcel de Londres, una mañana de 1916. Aquí se cuenta la peripecia vital de un hombre de leyenda: el irlandés Roger Casement. Héroe y villano, traidor y libertario, moral e inmoral, su figura múltiple se apaga y renace tras su muerte. Casement fue uno de los primeros europeos en denunciar los horrores del colonialismo con argumentos. De sus viajes al Congo Belga y a la Amazonía peruana quedaron dos informes memorables que conmocionaron a la sociedad de su tiempo, pues tras ellos se revelaba una verdad dolorosa: no era la barbarie africana ni amazónica la que volvía bárbaros a los civilizados europeos; eran ellos, en nombre del comercio, la civilización y el cristianismo, quienes cometían los actos más bárbaros.

Estos dos viajes y lo que allí vio cambiarían a Casement para siempre, haciéndole emprender otra travesía, en este caso intelectual, tanto o más devastadora. La que lo llevó a enfrentarse a una Inglaterra que admiraba y a militar activamente en la causa del nacionalismo irlandés. En plena I Guerra Mundial, viajó a Berlín para conspirar contra el Reino Unido y participó en el Alzamiento de Pascua de 1916, hecho que lo llevaría finalmente a prisión.

También en la intimidad, Roger Casement fue un personaje múltiple: La publicación de unos diarios, de veracidad dudosa, en los últimos días de su vida, airearon unas escabrosas aventuras homosexuales que le valieron el desprecio de sus compatriotas. En este territorio que se multiplica por cinco (África, la Amazonia, Irlanda, la cárcel, el sexo), El sueño del celta describe una aventura existencial, en la oscuridad humana aparece en su estado más puro y, por tanto, más enfangado. Una novela mayor de Mario Vargas Llosa.

martes, 28 de septiembre de 2010

COMUNICADO DEL OBISPO DE SAN VICENTE EN EL CASO ORDENACIÓN EPISCOPAL DEL PADRE LUIS QUINTANILLA Y RÉPLICA DEL IMPLICADO




Breve vocabulario:
Excomunión: es una de las penas previstas en el derecho canónico de la Iglesia católica. Por excomunión se entiende la censura o pena medicinal por la que se excluye al reo de delito de la comunión con la Iglesia Católica.
CIC= Abreviatura de la expresión latina Codex Iuris Canonici (Códico de Derecho Canónico). Se refiere al conjunto de cánones que rigen la disciplina eclesiástica de la Iglesia Católica Romana.
Magnificat: Es la primera palabra latina con que comienza el cántico o himno de alabanza y acción de gracias que profirió la Virgen María al visitar a Isabel (Lc 1,46-55): Alaba mi alma la grandeza del Señor...
A divinis: locución latina que significa de las cosas divinas. Expresión usada para designar la suspensión del ejercicio de sus funciones en los sacerdotes de la Iglesia Católica.
COMUNICADO DEL OBISPO DE LA DIÓCESIS DE SAN VICENTE
Para: Todos los Sacerdotes, Religiosas, Seminaristas y Laicos de la Diócesis.
De: Mons. José Elias Rauda Gutiérrez, OFM, Obispo de la Diócesis de San Vicente.Asunto: Comunicado sobre el P. Luis Alberto Quintanilla.

Queridos hermanos y hermanas:
Reciban un fraterno y cordial saludo de paz y bien.

El presente comunicado tiene como objetivo notificarles que, El Papa Benedicto XVI no ha nombrado Obispo de la Iglesia Católica al P. Luis Alberto Quintanilla. En conformidad con la legislación de la Iglesia, la Ordenación episcopal sin mandato pontificio comporta la Excomunión (cf CIC, c. 1382), y se incurre en ella, automáticamente, por el hecho de cometer el delito o cooperar directamente en él (can. 1314). Su aplicación no requiere proceso ni sentencia o decreto previos; puede haberlos posteriormente para declarar que el clérigo incurrió en la pena.

Es del conocimiento de todos que el mencionado P. Luis Quintanilla se afilió a una secta protestante llamada “Apóstoles de los últimos tiempos”, conocida también “La Orden del Magníficat de la Madre de Dios”, con sede en Canadá. La legislación de la Iglesia establece, que la afiliación de un clérigo a una secta es un delito contra la religión y la unidad de la Iglesia. Se trata de un delito de apostasía, herejía y posteriormente cisma, en el caso presente (CIC, c.1364).

También es del conocimiento de todos que Mons. José Oscar Barahona, mientras él era el Obispo de la Diócesis de San Vicente, en conformidad con la legislación canónica (cf. CIC, 1371,1373), suspendió “a divinis” al P. Luis Alberto Quintanilla, el 19 de mayo del año 2004; es decir, le quitó las licencias ministeriales; le prohibió celebrar todos los sacramentos, predicar en el país o fuera de él, realizar actos de la potestad de gobierno y las funciones del oficio eclesiástico que ocupaba (cf. CIC. cc. 1333,1334).

El P. Luis Quintanilla, desconoció y no obedeció la disposición de su Obispo y siguió celebrando la Eucaristía y otros sacramentos, promoviendo horas santas, predicaciones, la devoción a la Santísima Virgen María; y esto ha provocado confusión en algunos fieles de nuestra Diócesis. Esa llamada “iglesia católica salvadoreña”, de la que el P. Luis, dice formar parte, y en la que pretende ser ordenado obispo, no está en comunión con la Iglesia Católica fundada por Jesucristo y gobernada por el Papa Benedicto XVI.
Mi llamado de Pastor va dirigido, con especial atención a aquellos fieles, que de buena fe aprecian al P. Luis y han participado en algunas de sus celebraciones, para que se den cuenta la situación gravísima en la que se encuentra el P. Luis. Oren por su conversión y eviten seguir a alguien que se ha separado de la Iglesia Católica fundada sobre el Apóstol San Pedro y sus legítimos sucesores.

Que Cristo y su Santísima Virgen María, les bendigan y acompañe siempre.

Dado en la Curia diocesana de San Vicente, a los 23 días del mes de septiembre del año 2010.





LA RÉPLICA DEL SACERDOTE LUIS QUINTANILLA
AL COMUNICADO DE MONS. ELÍAS RAUDA

Fuente: MAGNIFICAT.

Queridos hermanos y hermanas:

El domingo 26 de septiembre del presente año, he conocido a través de otras personas de un comunicado del señor obispo de la Diócesis de San Vicente, en el cual se hacen acusaciones; ante las cuales quiero aclarar lo siguiente:

En primer lugar es falso que sea de la Orden del Magnificat de la Madre de Dios, la cual conozco pero no pertenezco a ella, como lo han asegurado.

También es mentira que la iglesia es de los apóstoles de los últimos tiempos. Somos una iglesia verdaderamente católica y auténticamente apostólica.

Aclaro que la explicación sobre las ordenaciones de obispo sin decreto pontificio que han dado a la gente es incompleta.

Tampoco es cierto que yo haya promovido un cisma, ya que no fue mi decisión separarme de la estructura diocesana de San Vicente, sino que fue una decisión del obispo José Óscar Barahona, en confabulación con el clero.

El hecho que no estemos bajo la jurisdicción de Roma, no significa que seamos de una secta como lo afirma el comunicado. Somos una iglesia legitimamente constituida, autónoma y autóctona, parte de la Una, Santa, Católica y Apostólica Iglesia.

A raíz de estos señalamientos infundados manifestamos ante el pueblo salvadoreño y la comunidad internacional lo siguiente:

1. Que el diálogo con la jerarquía de la Diócesis de San Vicente nunca ha sido buena, siempre han evadido hablar conmigo. Lo que han hecho es lanzar difamaciones a diestra y siniestra, por lo cual son ellos los causantes de la confusión en el pueblo. Durante ocho años he sido víctima de su marginación y repudio; y nunca les he reclamado, siempre me he dedicado a la labor pastoral que Dios me ha confiado.
2. La elección episcopal, no es algo que yo he buscado, sino que es apoyo de las iglesias hermanas que han visto el trabajo misionero que en El Salvador realizamos. Y para su validez como sacramento, solamente se necesita la materia y forma, sujeto y ministro.
3. Se sabe que Cristo fundó una iglesia sobre la base de los apóstoles la cual permanece ininterrumpida hasta hoy, y si la iglesia de Roma se siente orgullosa de la sucesión de Pedro y Pablo, existen iglesias cristianas católicas que gozan de la legítima sucesión de insignes apóstoles como Mateo, Lucas y Marcos; de quienes recibiré la sucesión.
4. Con frecuencia las iglesias católicas, apostólicas no romanas (nacionales, tridentinas, ortodoxas, occidentales, tradicionalistas, vétero, etc) son blanco de críticas por algunas jerarquías romanistas, tras considerarlas irregulares. Argumentan que tanto sus obispos como sus sacramentos no son reconocidos como católicos, cuando hay abundancia de documentos históricos que declaran su validez. San Jerónimo dice: si el que bautiza en su fe herética no puede dañar al bautizado, tampoco el que en su propia fe herética hace la ordenación del sacerdote le manchó. Y San Agustín afirma “una cosa es no tener algo y otra cosa es tenerlo ilegítimamente”. Los sacramentos hay que conocerlos y venerarlos.
San León Magno, no rechazó la dignidad del obispo Máximo que había sido ordenado en el cisma donatista, igual hicieron Anastasio II, San Gregorio Magno y León XIII.
5. El obispo tiene en virtud de la consagración episcopal una potestad de confirmar y ordenar que no se le puede quitar, porque si la iglesia pudiera anular esta potestad, es lógico creer que lo hubiera hecho en caso de cisma o herejía; y sin embargo nunca lo ha hecho, ya que la potestad episcopal viene de un sacramento y de un carácter impreso en el alma, no de un mero mandato pontificio.
6. La excomunión ha sido un arma que Roma ha usado para callar conciencias y matar el Espíritu. Para nosotros es un arma sin filo, significa que la jerarquía eclesiástica declara que no estamos en comunión con ellos, que no estamos bajo su jurisdicción, ni bajo su autoridad. Por lo cual les exigimos que respeten nuestra identidad.
7. La disposición legal que la jerarquía eclesiástica toma en mi contra no cambia en nada, ni la relación que tengo con Jesucristo y con su Santo Espíritu, ni nuestra plena pertenencia e integra comunión con la Iglesia Una, Santa, Católica y Apostólica como cuerpo místico de Cristo, con toda seguridad afirmo lo que la palabra de Dios declara. “Donde está el espíritu de Dios, ahí hay libertad” (2ª Cor. 3,17) y "no hemos recibido un espíritu de esclavos para vivir en el temor, sino un espíritu de libertad, que nos hace clamar Abba Padre” (Rm. 8,15).
Nuestra fuerza no viene de leyes humanas, sino de la ley de Dios, ni de palabra de hombres, sino de la bendita, infalible e inerrante palabra de Dios. Como dice el salmista. “Mi fuerza y mi poder es el Señor”. (Salmo 27, 7).


+Mons. Luis Quintanilla
Obispo por la gracia de Dios

viernes, 17 de septiembre de 2010

LA CARICATURA Y SUS FANTASMAS. NO VEA TELEVISIÓN, MEJOR VEA LA REALIDAD

TH-2
En eso nos estamos convirtiendo los salvadoreños, en una caricatura que nos ubica en el punto medio entre el simio y el ser humano; es decir, en un homínido hominizado.
El Salvador, que es en la actualidad un país joven y bello por naturaleza; por desgracia hemos sido conducidos y gobernados a través de la historia, por una chusma aldeana de mediocres, que lo que ha hecho es únicamente defender sus intereses, creando turbiamente situaciones que desestabilizan las fibras sociales de los habitantes de este lugar de la tierra.
De ahí, que en El Salvador, estemos en manos de personas inescrupulosas que saben muy bien que la manipulación inteligente y consciente de los hábitos y opiniones de las personas, son importantes en una sociedad tímidamente democrática, y que con dicha manipulación se desarticula cualquier defensa y toda posibilidad de creer en que se está construyendo una verdadera sociedad.
Ahora bien, por segunda ocasión en un año, se ha impuesto una especie de toque de queda por parte de las maras o pandillas. Esta realidad de toque de queda o estado de sitio que imponen las maras y pandillas, no es en manera alguna, algo que estos grupos pueden organizar y llevarlo a cabo sin la ayuda de un poder grande y oculto que tiene vigencia en nuestro país. Por ello, lo que se está padeciendo ahora, es en realidad, una argucia de aquellos poderes económicos que no están dispuestos a ceder ante la razón, la justicia y el estado de derecho.
Estos grupos obscuros usan la Televisión, la Publicidad y la Opinión Pública, manipulando de tal manera que presentan el verdadero poder y gobierno de cosas en El Salvador...los Medios de Comunicación, el cuarto poder, como suelen llamarse a sí mismos, son quienes en realidad nos gobiernan.
Esto supuesto, hay que reconocer que como Estado salvadoreño, no nos enfrentamos a una estrategia de maras o pandillas. Al contrario, nos estamos enfrentando al poder económico y financiero salvaje de unas cuantas personas con espíritu maquiavélico, que quieren seguir manteniendo y defendiendo el estado de cosas que les beneficia y que ha hecho de este país, su hacienda privada durante cientos de años.Justificar a ambos lados
Hago después de este comentario, un llamado a que leamos críticamente los acontecimientos que están ocurriendo en este momento y evitemos continuar siendo y pareciendo, una chusma aldeana guiada por mediocres. ¡Ánimo! Somos más y mejores las personas inteligentes en El Salvador que queremos cambiar esta realidad nefasta que han construido pequeños grupos oligárquicos con la ayuda de algunos medios de comunicación social.
Hago además un llamado a que, en el contexto de los 200 años de “independencia” centroamericana, construyamos un nuevo El Salvador. Refundemos El Salvador. Hagamos y forjemos una mejor vida en este país. Las grandes mayorías lo merecemos.

PERIODISMO DE TERROR


TH: Alguno atribuye estas ideas al pensamiento de N. Chomsky. Las ideas resultan aplicables al periodismo salvadoreño.
1. La estrategia de la distracción. El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las elites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes. La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética. ”Mantener la Atención del público distraída, lejos de los verdaderos problemas sociales, cautivada por temas sin importancia real. Mantener al público ocupado, ocupado, ocupado, sin ningún tiempo para pensar; de vuelta a granja como los otros animales (cita del texto ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.
2. Crear problemas y después ofrecer soluciones. Este método también es llamado “problema-reacción-solución”. Se crea un problema, una “situación” prevista para causar cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O también: crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos.
3. La estrategia de la gradualidad. Para hacer que se acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es de esa manera que condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de 1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad, flexibilidad, desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una sola vez.
4. La estrategia de diferir. Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla como “dolorosa y necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá mejorar mañana” y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el momento.
5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad. La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discurso, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante. Por qué? “Si uno se dirige a una persona como si ella tuviese la edad de 12 años o menos, entonces, en razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico como la de una persona de 12 años o menos de edad (ver “Armas silenciosas para guerras tranquilas”)”.
6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión. Hacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido critico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos…
7. Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad. Hacer que el público sea incapaz de comprender las tecnologías y los métodos utilizados para su control y su esclavitud. “La calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia que planea entre las clases inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca imposibles de alcanzar para las clases inferiores (ver ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.
8. Estimular al público a ser complaciente con la mediocridad. Promover al público a creer que es moda el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto…
9. Reforzar la autoculpabilidad. Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se autodesvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de su acción. Y, sin acción, no hay revolución!
10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen. En el transcurso de los últimos 50 años, los avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los conocimientos del público y aquellos poseídas y utilizados por las elites dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el “sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos.

martes, 7 de septiembre de 2010

LOS HIJOS DEL MIEDO


TH-1
Este día hemos comprobado que la población salvadoreña le dio el voto presidencial a Funes, pero no ha vencido el miedo. Esto lo tienen bien claro los capitalistas salvadoreños.
Quienes han paralizado al país este día no han sido los mareros, sino los medios de comunicación. Para ser más precisos, los dueños de los medios de comunicación social. Es un "paro mediático" no de mareros.
Lo que más se notaba por las calles no era gente normal manifestando su repudio a la mafia y a la corrupción, como hubiera ocurrido en cualquier país con un alto nivel de conciencia social participativa, sino policías y soldados; es decir, la prueba más evidente de que no hemos superado la etapa militarista.
El terrorismo más lacerante no procede de los mareros, sino de los medios de comunicación social solamente interesados en aumentar sus ganancias.
El canal 21 le concede entrevistas a mareros: JAMAS SE LES CONCEDEN ENTREVISTAS TELEVISIVAS A MAREROS O A TERRORISTAS. Los del canal 21 son también terroristas. Los amarillistas de TCS también distribuyen miedo a raudales.
Jamas se ha visto en este país una pizca de periodismo de investigación; para los periodistas del capital todo es vender.
En estos días estamos perdiendo la oportunidad de manifestarnos en masa para decirles a los mafiosos de la región centroamericana que no les tenemos miedo.
Que nadie se engañe. El presente "paro" es la enésima cortina de humo para desviar la atención de los "barrilazos" de los narco-dólares que se han encontrado recientemente; para que la gente no piense que los narco-diputados asesinados en Guatemala tenían y tienen fuertes nexos con políticos salvadoreños.
¿Qué se hicieron los intelectuales de nuestro país? ¿Dónde está el juicio crítico de nuestras universidades? ¿Dónde están los profetas del mercado de las religiones?..... Todos unos vendidos al gran capital, interesados solo en agrandar sus solemnes barrigas y en perpetuarse en un infinito bostezo.
Una vez existió un país con alta moral combativa, hoy indignamente llamado El Salvador.

miércoles, 25 de agosto de 2010

FEDERICO GARCÍA LORCA (I)



Federico García Lorca, uno de los poetas más insignes de nuestra época, nació en Fuente Vaqueros, un pueblo andaluz de la vega granadina, el 5 de junio de 1898—el año en que España perdió sus colonias. Su madre, Vicenta Lorca Romero, había sido durante un tiempo maestra de escuela, y su padre, Federico García Rodríguez, poseía terrenos en la vega, donde se cultivaba remolacha y tabaco. En 1909, cuando Federico tenía once años, toda la familia—sus padres, su hermano Francisco, él mismo, sus hermanas Conchita e Isabel—se estableció en la ciudad de Granada, aunque seguiría pasando los veranos en el campo, en Asquerosa (hoy, Valderrubio), donde Federico escribió gran parte de su obra.
Más tarde, aun después de haber viajado mucho y haber vivido durante largos períodos en Madrid, Federico recordaría cómo afectaba a su obra el ambiente rural de la vega: “Amo a la tierra. Me siento ligado a ella en todas mis emociones. Mis más lejanos recuerdos de niño tienen sabor de tierra. Los bichos de la tierra, los animales, las gentes campesinas, tienen sugestiones que llegan a muy pocos. Yo las capto ahora con el mismo espíritu de mis años infantiles. De lo contrario, no hubiera podido escribir Bodas de sangre.”
En sus poemas y en sus dramas se revela como agudo observador del habla, de la música y de las costumbres de la sociedad rural española. Una de las peculiaridades de su obra es cómo ese ambiente, descrito con exactitud, llega a convertirse en un espacio imaginario donde se da expresión a todas las inquietudes más profundas del corazón humano: el deseo, el amor y la muerte, el misterio de la identidad y el milagro de la creación artística.

lunes, 9 de agosto de 2010

GRANDEZA Y MISERIA DEL CULTO PÚBLICO A LA EUCARISTÍA: ¿EXPRESIONES REALES O CARICATURAS DE LA RELIGIÓN CATÓLICA EN EL SALVADOR?





















TH
A nadie escapa en nuestros días que una de las expresiones del catolicismo contemporáneo de El Salvador es el culto público a la hostia consagrada. En la religión católica la Eucaristía tiene un lugar central.
Pero, siempre surgen preguntas: ¿no tiene la impresión el ciudadano analítico que algunas expresiones del culto a la hostia tienen una fuerte carga mediático-propagandística? ¿Todas las "horas santas" promovidas por los promotores del culto a la especie consagrada son gratis? Y si se ha dado el caso de que algunas personas hayan pagado por adorar al Santísimo ¿cómo se explica ese comercio? ¿En cuáles documentos de la Iglesia se fundamenta el precio -o como se prefiere decir- la ofrenda que se paga por adorar al Santísimo? ¿A partir de cuál siglo se paga por adorar la hostia?...

Como no es fácil dar respuesta a tanta pregunta, lo mejor es escuchar a los entendidos, a ver si alguno de los lectores nos va explicando en tono moderado y con documentos históricos eso de pagar por asistir a una hora santa de adoración al Santísimo Sacramento del Altar.

Como motivación transcribimos lo siguiente:

La Iglesia y la Eucaristía son realidades concomitantes, una reclama a la otra. Los Padres de la Iglesia tenían claro que la Iglesia se funda en la Eucaristía; este principio se suele expresar con una frase latina: Ecclesia de Eucharistia (La Iglesia vive de la Eucaristía). Bien lo sabía el papa Juan Pablo II, que dedicó en el año 2003 toda una encíclica a la relación entre la Iglesia y la Eucaristía.


El texto bíblico que suele ser reclamado para fundar la Eucaristía es el de la última cena. En sentido litúrgico coincide con la celebración del jueves santo, que justamente se entiende in coena Domini(en la cena del Señor), dando inicio al triduo pascual, la máxima expresión de la liturgia de la Iglesia.


1. La necesaria y permanente conversión eucarística
Para saber el auténtico y originario sentido que tiene la Eucaristía hay que retornar al texto bíblico, en este caso Jn 13, 1-15. Hay que leerlo detenidamente para sacar toda la riqueza del gesto realizado por Jesús.

El contexto es la pascua judía, que, como es de esperarse, en Juan está vinculada al tema del amor (v. 1), a la realización de los designios del Padre y en constante dialéctica con el mal (v. 2).

El primer gesto sorprendente se da cuando Jesús se despoja de su vestido de fiesta para ceñirse una toalla, disponiéndose a lavar los pies a sus discípulos.

La Eucaristía supone un constante proceso de conversión para quien participa de ella; una concreta conversión: el despojamiento de todo signo de poder que empañe su sentido originario de servicio.

Este proceso de conversión –como todos los procesos de conversión- no resulta fácil entenderlo y asimilarlo, sobre todo para los que se han habituado a vivir la eucaristía de un modo rutinario y desencarnado.

A tal punto es difícil la “conversión eucarística”, que el mismo texto presenta a Jesús y al príncipe de los apóstoles enfrascados en tremenda discusión. La cuestión se plantea así: No, le dijo Pedro, ¡tú jamás me lavarás los pies a mí!. Jesús le respondió: Si yo no te lavo, no podrás compartir mi suerte(v. 8). La vivencia eucarística pone a la persona en lo más específico del discipulado. Lleva al creyente a un punto definitorio: “o lo tomas o lo dejas”.

En este segundo gesto –la discusión con Pedro- el evangelista Juan intenta decirle a la comunidad de Pedro, en primer lugar, que la Eucaristía efectivamente es esencial para comprender el mensaje del Maestro; en segundo lugar, que esa esencialidad va entendida como bajar a los hechos concretos del servicio a los hermanos. Es como si el buen Juan le dijera al fogoso Pedro: “tú tienes las llaves, pero no se te olvide que se trata de servir y no sólo de mandar”.

El tercer gesto tiene un perfecto paralelismo con el primero. Jesús se quita la toalla y se vuelve a vestir con su traje de fiesta (v. 12). Como se deduce del texto, no porque un obispo, un sacerdote, o un laico bajen a lavarle los pies al pueblo pierden su dignidad o su status social. Es más, en ese caso su status sería más creíble.

En consecuencia, la Eucaristía configura a la Iglesia desde el servicio al prójimo. Por lo menos esa es la impresión que le queda al lector bien intencionado: Si yo, que soy el Señor y el Maestro, les he lavado los pies, ustedes también deben lavarse los pies unos a otros (v. 14). Les he dado el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo hice con ustedes (v. 15). En todo caso, si alguien tiene duda de quién sea su prójimo, remítase a la parábola del Buen Samaritano, en la cual queda claro que la investidura sacerdotal y los grados académicos no aseguran el ejercicio de la misericordia (cfr. Lc 10, 25ss.).


2. La Eucaristía, corazón de la Iglesia
Del texto evangélico de san Juan no es difícil pasar a la connotación litúrgica de la Eucaristía.

La afirmación central al respecto está expresada en n. 1324 del Catecismo de la Iglesia Católica, que encontramos también en el n. 11 de la Lumen Gentium: “La Eucaristía es fuente y cima de toda la vida cristiana”.

La Eucaristía es el corazón de la Iglesia y de la vida cristiana en general. Con una función de diástole y sístole. De sístole porque nos convoca durante la celebración de la Misa y otra de diástole porque nos envía a impregnar el mundo de servicio. Si esta dinámica no se cumple, algo gravemente negativo estará pasando en la relación Iglesia-Eucaristía.


3. Las caricaturas de la Eucaristía
Como hemos intentado mostrar, la centralidad de la Eucaristía tiene fundamento bíblico y también doctrinal. Pero, ¿es posible que se den reducciones de la riqueza antes indicada?

Del texto bíblico del Evangelio de San Juan se deduce que la Eucaristía no se refiere solamente a las especies eucarísticas, sino que remite a una praxis eclesial y existencial de servicio en la caridad. Es evidente que Jesús primero lava los pies a sus discípulos y sólo después consagra el pan y el vino. Por tanto el gesto de servicio es condición para entender el gesto sacramental, que realizará en un segundo momento.

Ahora bien, dado que Jesús no da algo a sus discípulos, sino que se da a sí mismo. Entonces la Eucaristía, en sentido estricto, es una forma de vida, es un modo de estar en la historia, es una donación de la propia persona. Creo que San Ignacio de Antioquía no tendría reparos en que nos viéramos a nosotros mismos como “hostias vivas” deseosas de testimoniar aquello que hemos recibido como un don de parte de Jesús.

Pero, la tendencia actual en cierta parte de la Iglesia católica salvadoreña es la de acentuar el culto público a la Eucaristía en detrimento de su valor existencial y eclesial, alejándolo del modo como lo veían San Ignacio de Antioquía y toda la tradición patrística-.


3.1 Datos históricos sobre el culto a la Eucaristía
Conviene tener presente que los datos sobre el culto a la Eucaristía aparecen por primera vez en torno a la vida de Santa Dorotea (1394).

Las disputas teológicas en torno a la esencia del sacramento del altar dan inicio en el período pre-escolástico (s. IX) y coincide también con el apogeo del culto a las reliquias (s. X).

Berengario de Tours (1000-1088), negó abiertamente la transformación de los elementos eucarísticos, dándoles solamente un valor simbólico, lo que más tarde el Magisterio de la Iglesia denominará la transubstanciación. Las tesis de Berengario fueron condenadas por varios sínodos y tuvo que someterse a la autoridad de Gregorio VII en 1079. La estable definición de transubstanciación se dio en el IV concilio de Letrán (1215). Ese mismo concilio establece la obligación de la confesión y la comunión anuales.

Los textos patrísticos inculcaron la devoción a la Eucaristía, pero casi siempre lo relacionaban con la celebración de la misa. En cambio la novedad en el período pre-escolástico y escolástico radica en la adoración al santísimo, conservado fuera de la celebración de la misa.

En el siglo XII se da un aumento de la devoción al santísimo, públicamente expuesto. Pero el culmen se alcanza en el siglo XIII con la institución de la fiesta del Corpus Domini. Las primeras acciones que motivaron a su institución se suelen relacionar con una revelación privada del Señor a la beata Juliana de Lieja (1258), según la cual, Cristo mismo pedía una solemne manifestación en honor al sacramento del altar. Examinaron la pertinencia de la revelación el cardenal legado Ugo di San Caro y el archidiácono de Lieja, Jacques Pantaléon de Troyes. La sentencia de los dos personajes fue favorable. De inmediato el obispo de Lieja introdujo la fiesta en su diócesis en 1246.; lo mismo hizo el cardenal Ugo en territorio germano occidental. Mientras tanto, Pantaléon de Troyes, electo Papa en 1261, bajo el nombre de Urbano IV, extiende la fiesta a toda la Iglesia en 1264. Por encargo del Papa, Tomás de Aquino compuso los himnos Lauda Sion y Pange Lingua-Tantum Ergo.


Como es sabido, en los siglos posteriores, la reforma protestante no admitió la presencia real. Como contrapeso, en el s. XVI surge la práctica de las 40 horas eucarísticas.


3.2 Límites y desviaciones del culto a la Eucaristía
Según la doctrina de la Iglesia la reserva eucarística tiene como fin primario la administración del viático y la asistencia a los enfermos. En cambio, la distribución de la Eucaristía fuera de la misa y el culto a la Eucaristía son fines secundarios (cfr. Conc. de Trento, Denz.Sch. 1645; Pío X, Denz.Sch. 3375; Pío XII, Mediator Dei, AAS 39, 1847, 569; S. C. de Sacramentos, Instrucción Quam plurimum, 1 oct. 1949, AAS 41, 1949, 509-510; Instrucción de la S. C. de Ritos, 25 de mayo 1967, n. 49). Sobre la recomendación de no exagerar: Decreta authentica Congregationis sacrarum Rituum, Roma 1898-1927, n. 800. CIC c. 1274. Concilio de Colonia 1452. La Instrucción Eucharisticum Mysterium, n. 61. Instrucción De Sagrada Congregación de Ritos, 3 de septiembre de 1958, n. 47.

El Código de Derecho Canónico actual, cuando habla del culto público a la Eucaristía se muestra más bien moderado, recomienda que “como testimonio público de veneración a la santísima Eucaristía, donde pueda hacerse a juicio del obispo diocesano, téngase una procesión por las calles, sobre todo en la solemnidad del Cuerpo y Sangre de Cristo (944 § 1). No habla en modo indiscriminado de adoraciones incontroladas al Santísimo. Es más, según el CIC, “corresponde al Obispo diocesano dar normas sobre las procesiones, mediante las cuales se provea a la participación en ellas y a su decoro” (944 § 2).

La impresión que se tiene en la Iglesia salvadoreña es que no existe control claro de parte de algunos obispos con respecto a la difusión de las adoraciones eucarísticas en espacios públicos. Cabe preguntarse si todos los párrocos piden permiso a su obispo cuando invitan a los sacerdotes promotores de las adoraciones públicas del Santísimo. Es más, cabe preguntarse si éstos rinden informe económico a su obispo de cuánto han tenido que pagar a los clérigos y a los ministerios que promueven ese tipo de evento?

Asimismo, es sano preguntarse si no se han puesto a pensar nuestros obispos que con la práctica indiscriminada y desordenada de la adoración al Santísimo se corre el peligro de banalizar su propia esencia. La trivialización del culto a la Eucaristía ¿no será signo de intereses bien distintos a los de promover la teología y la eclesiología del misterio eucarístico?

El aparato mediático de adoración al sacramento fomenta más la evasión y no tanto la convicción. Actualmente, muchos católicos piensan que asistir a una exposición del Santísimo es más importante –por lo que tiene de curativa y mágica- que la celebración misma de la misa. Otros están convencidos que exponer la hostia consagrada día y noche traerá resultados automáticos al proceso de evangelización.

Si la Eucaristía es fuente y culmen de la vida cristiana. Entonces, asistir a la misa debería ser sinónimo de celebrar los logros que nuestras comunidades están realizando en el proceso de la organización pastoral y evangelizadora. Ella misma sería la fuente de la que se nutrirían las comunidades para seguir evangelizando. Pero ¿cómo puede alimentar el proceso evangelizador una visión desvirtuada del sacramento del altar? Uno debería preguntarse cuando participa de la misa: ¿Qué es lo que estamos celebrando? Y ¿para qué? El culto a la Eucaristía no puede sustituir los procesos de evangelización, pues se trata de elementos complementarios no sustitutivos.

Por otra parte, la vida cristiana implica además la participación de los cristianos en la vida social y política. Es un error, dar a entender a las personas sencillas que participar de la misa o en una hora santa no tiene nada que ver con el compromiso de testimoniar la verdad y la justicia en el mundo.

De todos los aspectos negativos mencionados, la caricatura más terrible, la más nociva de todas, es la que ve a pastores de la Iglesia católica cobrando elevadas sumas de dinero por exponer el santísimo. Se ha llegado al punto de ya no querer celebrar la misa, sino simplemente llevar la hostia consagrada y exponerla, pues en el caso que hubiera misa, piden incluso llevarse la colecta. En este caso, el culto a la Eucaristía –en el modo en que lo entienden estos mercaderes de la fe- atenta contra la esencia misma de la Iglesia, íntimamente vinculada a la Eucaristía.

Por consiguiente, estos sacerdotes confunden y reducen la teología de la eucaristía con ese negocio que ellos llaman culto eucarístico.


4. Desvirtuar la Eucaristía es atentar contra la Iglesia
De todo lo dicho se concluye, en primer lugar, que la Eucaristía es un elemento esencia de la Iglesia y esto es evidente en el amor y respeto que muchos cristianos manifiestan hacia ella.

En segundo lugar, hacemos notar que es nocivo para Iglesia misma el que se manipule ese sentimiento religioso de devoción a la Eucaristía para obtener beneficios materiales. No es un secreto para ningún párroco, que muchas veces se han organizado adoraciones masivas del santísimo con el único objetivo de recoger fondos para construir un salón parroquial, como si la Eucaristía pudiera ser manipulada para fines lucrativos.

De ahí el llamado a recuperar el sentido integral y originario de la teología eucarística y de su equilibrada praxis eclesial.

Para cerrar nuestra nota, dejamos para consideración del lector un par de textos eucarísticos provenientes de escritos patrísticos.

Dejadme ser pasto de las fieras, por las cuales se alcanza a mi Dios. Trigo soy del Señor, y en los dientes de las fieras debo ser molido para convertirme en pan purísimo de Cristo (Ignacio de Antioquía a los cristianos de Roma, s. II).

Estas palabras de Ignacio de Antioquía, causan risa a los negociantes de la Eucaristía, les suenan a mitología del pasado. ¡Claro! Lo únicamente cierto para ellos son sus cuentas bancarias y las fundaciones para lavar el dinero procedente de eso que ellos llaman culto eucarístico. Ustedes son Simón Mago resucitado (cfr. Hch 8, 9-24), le dan al pueblo remedios mágicos no soluciones reales. Y todavía les quedará tiempo para rasgarse las vestiduras cuando algún “Lutero contemporáneo” les escupa la verdad en la cara.


Por tanto, no perdamos de vista las cosas esenciales. Tertuliano solía decir:

Nadie me parecería más desvergonzado que quien con agua ajena es bautizado para otro dios, extiende las manos hacia cielo ajeno a otro dios, se postra en tierra ajena a otro dios, sobre pan ajeno da la acción de gracias a otro dios, de bienes ajenos hace beneficencia con nombre de limosna y de amor por otro dios (Tertuliano, Contra Marción, s. II).
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