21 de enero de 2014
El 13 de octubre de 2004 Mario Alexander Flores Bermúdez fue
acusado de agresión sexual en una mujer de 21 años. Según documentos de la
policía de Houston, Texas, Flores Bermúdez fue encontrado culpable y condenado
a tres años de libertad condicional.
Como parte de su condena debía registrarse como un agresor
sexual y no le estaba permitido cambiar de dirección, la que según el
expediente era 12226 South Drive, Houston, TX 77099, donde se sabe que residía
hasta el 15 de agosto de 2010.
Flores Bermúdez estaba en la obligación de reportar
cualquier cambio de dirección con el departamento de Policía de Houston dentro
de un periodo de siete días, pero los oficiales realizaron una inspección el 29
de septiembre de 2010, en la que se determinó que tenía poco más de un mes de
haber dejado esa residencia, por lo que de inmediato se le sumó el cargo de
violación a los términos de la libertad condicional.
La oficina del Marshall de Estados Unidos confirmó a El Blog
que se trata de la misma persona que el 21 de diciembre de 2013 habría causado
la muerte de tres personas en el redondel Masferrer, al conducir su vehículo a
excesiva velocidad sobre el Paseo General Escalón, chocar contra el triángulo y
estrellarse contra otro vehículo que circulaba por la zona.
Max Piñon, de la oficina del Marshall de Estados Unidos,
detalló que "este caso es complicado" que en vista que Flores
Bermúdez no es ciudadano estadounidense "no procede la extradición",
o la deportación que se utiliza en algunos casos; sin embargo, detalló que si el
imputado regresa a territorio estadounidense sería puesto a la orden de los
tribunales y podría ser enviado a prisión.
Mario Alexander recuperó su libertad este martes 21 luego
que su madre canceló la fianza de $10,000 que el juez Sexto de Instrucción determinó
como medida sustitutiva de la prisión.
La decisión de concederle libertad a Flores Bermúdez causó
un fuerte rechazo de parte de los usuarios de redes sociales que interpretan la
determinación como un trato especial que estaría recibiendo el imputado y como
el paso previo a la impunidad.
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